El Plan de Dios para sus hijos.

Éxodo 19:3-6. ³Y Moisés subió a Dios; y Jehová lo llamó desde el monte, diciendo: Así dirás a la casa de Jacob, y anunciarás a los hijos de Israel: ⁴Vosotros visteis lo que hice a los egipcios, y cómo os tomé sobre alas de águilas, y os he traído a mí. ⁵Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra. ⁶Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel. Amén.

En esta escritura vemos cómo Dios llama a Moisés a la cumbre del monte Sinaí y le dice todas las palabras que debe de decir al pueblo Israel. Y lo primero que les dice es ⁴Vosotros visteis lo que hice a los egipcios. En otras palabras, está diciendo, ustedes vieron todas las plagas que mande a Egipto y como quedaron el día que les dieron la libertad a ustedes, ustedes vieron como les abrí el mar rojo para que ustedes pasaran en seco y como se hundieron los ejércitos de Faraón en el mar, ustedes son testigos de las maravillas que he hecho en el pasado. No tengan miedo.

Después les sigue diciendo en el verso, ⁵Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos. Dice Dios, Dios esta diciendo si ponen atención y ponen en práctica mis palabras, ustedes serán mi especial tesoro. Cuando dice mi especial tesoro, está diciendo, ustedes serán lo más querido en la tierra y en el cielo, ustedes serán lo que mas voy a querer en toda la eternidad.

Hay un plan de Dios para cada uno de ustedes, Dios les dice, miren, mía es toda la tierra y ustedes me serán un reino de sacerdotes, gente santa, en la que no se encuentre maldad, gente limpia de alma, de espíritu, de mente y de corazón, gente que tenga temor a Dios y se guarde del mal. Dios tiene un plan para usted. Dios ha hecho de todos los que le reciben un sacerdocio santo para que administren sus bienes eternos en esta tierra y en la eternidad. Dijo Dios si ustedes me buscan de todo corazón, todo lo que necesiten se los daré como añadidura a las bendiciones que les tengo preparadas. Creo que no hay nada mas lindo que estar en acuerdo con aquel que es dueño de todas las cosas en el cielo y en la tierra. Vivir separados de Dios, es vivir en la desgracia más grande, porque el final será la muerte eterna.

Dios siempre ha querido preparar un pueblo para que sean sus ministros por siempre, y hoy nos habla en el libro de Hebreos 12:13-16. diciendo: haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado. 14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. 15 Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados; 16 no sea que haya algún fornicario, o profano, como Esaú, que por una sola comida vendió su primogenitura.

Dios dice: cuídense de esas cosas, porque si esas cosas aparecen en la vida de ustedes, puede ser que las bendiciones no lleguen y pierdan todas las promesas hechas a ustedes, entendiendo que la santidad conviene a la casa de Dios. Si mantenemos nuestra intima comunión con Dios, el mundo no tendrá entrada en nuestra vida. No olvides Dios tiene un plan contigo y ese plan es eterno.

El salmista David decía en Salmo 93:5. Tus testimonios son muy firmes; La santidad conviene a tu casa, Oh Jehová, por los siglos y para siempre. Todo el que desea entrar realmente en el reino de Dios, apártese del pecado, viva en santidad, Trabaje sus dones o ministerios, que cuando el Señor aparezca lo encuentre ocupado en la labor que Dios le encomendó. Trabaje con su pastor y sea fiel para que cuando aparezca el príncipe de los pastores usted reciba la corona incorruptible de gloria que Dios prometió a todos los que le aman y guardan su palabra.

De todo corazón quiero hacer una oración por alguien que quiera recibir a Cristo Jesús como su salvado.