No deis lugar al diablo

Efesios 4: 22 En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, 23 y renovaos en el espíritu de vuestra mente, 24 y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad. 25 Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros. 26 Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, 27 ni deis lugar al diablo. 28 El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad. 29 Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. 30 Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. 31 Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. 32 Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.

Esta enseñanza es para Hijos de Dios. Es claro que todos hemos tenido un pasado incierto, pero hoy que estamos en Cristo Jesús todo debe haber cambiado, Escuche como lo enseña el apóstol Pablo en Efesios 4:22-23. En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, 23 y renovaos en el espíritu de vuestra mente. Lo que esta diciendo el apóstol es: la forma en que Vivían antes debe haber desaparecido de nosotros, porque no era conforme la voluntad de Dios, la forma de pensar de ustedes debe ser conforme al Espíritu Santo que hoy tenemos dentro de nosotros. Si esto no ha sucedido en su vida debe trabajar en usted mismo hasta que lo logre.

Cuando damos lugar a Dios a que trabaje en nuestras vidas, El nos transforma y esto es lo que debe suceder en la vida del cristiano, escuche lo que dice la escritura en Efesios 4:24. y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad. vestirse del nuevo hombre es vestiré de Cristo Jesús. La escritura dice que debe haber un revestimiento en justicia, Santidad y en la verdad. O sea, nuestra vida debe ser genuina no superficial. Escuche como lo dice el verso 25. Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros. Son muchas las personas en la congregación que tienen la costumbre de mentir, criticar, muchas beses le dicen una cosa a uno y luego nos damos cuenta de que nos mintieron. En la Iglesia formamos el cuerpo de nuestro Señor Jesucristo y eso no debe acontecer. Al Señor no le agrada la mentira, la mentira es una naturaleza del diablo.

Cuando se descubre que mintieron, las personas se enojan; son muchas las razones por las que una persona se puede enojar, y es ahí donde empiezan las raíces de amargura, los rencores, las contiendas, las maledicencias, las peleas, se pierde la confianza; pero escuche usted lo que dice el apóstol sagrado en Efesios 4:26-27. Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, 27 ni deis lugar al diablo. En una conversación o en algo que se hizo mal, una persona se puede enojar, pero no guarde ese enojo, arregle lo que no le gusto con la persona que lo ofendió, sin que pase mucho tiempo, porque sí deja pasar el tiempo, las cosas empeoran. Dejar pasar el tiempo con un enojo en el corazón crea raíces de amargura en contra de las personas que lo ofendieron y luego viene el distanciamiento, las sospechas y más. Dejar pasar el tiempo con un enojo en el corazón es dar lugar al diablo para que lo siga destruyendo.

Modelar la nueva criatura no es fácil, pero se puede, escuchemos al apóstol Pablo como nos sigue instruyendo en Efesios 4:28-29. El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad. 29 ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. En esta escritura Pablo esta enseñando a los hermanos como debe ser su comportamiento y les dice: El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad. Luego les dice: ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. O sea; no diga nada para ofender a otros, sino para edificar a los demás.

Ser grosero con otros contrista el Espíritu de Dios y eso limita las bendiciones, escuche como lo enseñan las sagradas escrituras en Efesios 4: 30-31. Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. 31 Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. La escritura dice: no entristezcáis el Espíritu de Dios, porque con El fuisteis sellados para la redención, después que dice estas palabras explica las cosas que contristan el Espíritu Santo de Dios. Lo dice así: Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Todo lo que es pecado entristece el Espíritu Santo de Dios, pero estas cosas que menciona, hace mucho mal a la vida espiritual del cristiano.

Pablo recomienda a los cristianos que sean llenos de amor, que perdonen a los que los ofenden y que sean un ejemplo de verdaderos cristianos, lo dice así en

Efesios 4:32. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo. Nosotros los cristianos estamos supuestos a mostrar a los demás el amor de Cristo Jesús, quien estando a punto de morir perdonaba a los que lo asechaban. Jesús ascendió al cielo el día de la resurrección, pero su amor lo dejo con nosotros para que lo sigamos mostrando al mundo y a los que nos rodean.

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